"No me gusta el sexo con las groupies, y tengo miedo que me ataquen" Con estas palabras Bill Kaulitz, el cantante de la exitosa banda Tokio Hotel, inicia una serie de relevaciones. Ellos hicieron una breve parada en Oberhausen, en su más reciente gira. Miles de fans entusiasmados esperaban en fila en circunstancias extraordinarias. Pero, ¿Qué precio tienen que pagar por su éxito?
¿Con qué frecuencia Bill Kaulitz tiene relaciones sexuales?
Bill: No tengo una chica en mi habitación desde hace muchos años.
¿Cómo es vivir con el temor de ser atacado?
Tom: Es algo con lo que vivimos siempre, siempre habrán personas que nos odien.
¿Y cómo lidian con el hecho de que no pueden dar un sólo paso sin guardaespaldas?
Bill: Tienes que pensar si estas dispuesto a vivir en estas condiciones. Y lo estamos.
Nos encontramos con Tokio Hotel, y hemos recibido respuestas muy francas a preguntas muy íntimas. En la noche del viernes, 11,000 fans esperaban dentro de la Arena en Oberhausen, por el objeto de su deseo, Bill Kaulitz. Una brillante mezcla entre un guerrero, un ángel y un extraterrestre. Sin duda, alguien que no es de este mundo. Algunos movimientos de baile son suficientes para llevar a la multitud al éxtasis. Y cuando el canta sobre el amor, lo que se oyen son gritos. Irónicamente, Bill canta sobre algo que no tiene. Enamorarse y tener novia para él no existe desde que comenzó a tener éxito en el mundo. La última vez que estuvo enamorado fue cuando tenía catorce años, hace seis años. El no quiere encontrar consuelo en el sexo por una noche.
Bill: Ya hace algunos años que no tengo una chica en mi habitación. Me gustaría enamorarme de alguien y pasar un tiempo con ella y conseguir la confianza necesaria para tenerla dentro de mis cuatro paredes y el tourbus… ¿Qué?
Tom: Nada, Nada…
Bill: Para eso tendría que enamorarme. Y así, el sexo con alguien que esta primera fila en un concierto, esta fuera de contemplación.
Tom: Para mi no, por eso no estoy triste.
El hermano gemelo Tom, al parecer piensa de manera diferente sobre el tema. Pero las chicas parecen estar más interesadas en la estrella de Tokio Hotel, Tom, que en su persona.
Tom: Si tú solo quieres divertirte, no importa mucho si te gusta esa persona, es algo imposible, porque no te conocen y te ven solo por la TV. En ese momento no importa no estoy interesado. Es solo el físico y es algo que tú (Bill) no consigues.
Bill: Sí.
El abandono del sueño de enamorarse no es el único sacrificio que el éxito mundial requiere en la banda. Debido a algunas experiencias malas que Bill ha tenido, los guardaespaldas ya han tenido que sacar gente de la alfombra roja, que se hacen pasar por fans, pero que estan armados con cuchillos.
Bill: Incuso lo de este cuchillo fue el comienzo de nuestra carrera. Yo tenía 16 años. Han pasado cuatro años desde que esto paso y estas cosas crecen. No conoces otra cosa.
Bill se siente seguro solo si esta completamente protegido. Prueba de los hechos, al comienzo de la semana, solo él, los miembros de la banda y los gemelos de Dsquared que crearon los trajes especiales.
Bill: ¡Sí, fiesta!
Un momento sin miedo o estrés. Siempre es un riesgo para Bill y los demás estar entre el publico.
Bill: Creo que fue en Los Angeles que un fan invadió el escenario y trato de llevarse el tono del público. Y otras cosas que ya han sucedido en la alfombra roja y apariciones en programas de TV.
Un grupo de fans francesas siguieron a sus ídolos durante muchos meses el año pasado. En una estación de gasolina la situación llego a su fin. Las chicas persiguieron y atacaron a Tom por lo que perdió la paciencia y golpeo a una. Esta semana se anunció que Tom tendría que pagar 1.000 euros y pedir disculpas. El caso fue cerrado. Ser perseguidos le puede pasar a cualquier otra estrella, pero Tokio Hotel siempre dicen que han tenido más enemigos que la mayoría (de estrellas), como sucedió en la escuela.
Tom: Es algo con lo que estamos viviendo, yo al menos no recuerdo lo que no es ser odiado. Quizás lo necesitamos. Esta claro que a pesar de todo siempre es un riesgo.
Pero al igual que los cuatro puntos de vista extremos. La imagen en Alemania de "La banda adolescente no es tomada en serio"
Bill: Hubo una vez una encuesta de TV en la calle donde a la gente le daban que escuchara una canción y adivinaran de que grupo es, a la gente les gusto, pero después que se dieron cuenta que era de Tokio Hotel dijeron: después de todo no son tan buenos.
En el extranjero, no es el caso. Después de dos conciertos en Alemania, entre otros lugares irán a Moscú, Madrid, Roma y París. Tokio Hotel ha alcanzado un grado de popularidad con su éxito en todo el mundo, algo que no es muy común entre los músicos alemanes. Pero por esta misma razón también tienen que vivir una vida fuera de lo normal. Ir a un café o ir de compras para Bill es algo inimaginable.
Bill: Quizás el momento que sea oportuno será cuando las tiendas ya estén cerradas. Esto ya ha ocurrido un par de veces. Nos vamos al cine a veces a ver películas después de haber pasado la última sesión oficial.
¿Siempre con guardaespaldas?
Bill: Al menos uno, pero la mayoría de veces son más (guardaespaldas). Siempre hay alguien con nosotros. No puedo imaginarme sin tener a alguien conmigo.
¿Tener fama, dinero y esto vale la pena?
Bill: Debes estar dispuesto a renunciar a ciertas cosas. No se puede tener todo. No puedes tener privacidad, no puedes tener una novia. No es como funciona. Tienes que aprender a aceptarlo y vivir con eso. Hacer nada, o también podríamos renunciar.
Bill y Tom tienen apenas veinte años. Están en este mundo desde hace 10 años, hoy en día son estrellas mundiales. Su vida en el ojo público es única, positiva y negativa. No tienen preocupaciones financieras y son adorados por miles de fanáticas. A cambio de eso, temen por sus vidas, un precio demasiado alto a pagar. Tokio Hotel nos ha permitido ver su privacidad. Y tenemos la impresión de que, al menos por ahora, el precio que pagan es libre.